No queremos reinventar la rueda. Queremos que sea nuestra.

Las instituciones trabajan con herramientas que no son suyas, que no se adaptan y que limitan su potencial. Aun así, cumplen. Pero lo hacen a costa de depender de otros.

El primer paso es empezar por la infraestructura digital. Sin dependencias.

Tecnología europea.

Sólida. Segura. Soberana.

— por dónde empezamos

Donde más se nota: en cómo trabajan y se organizan nuestras instituciones.

El primer paso es desarrollar un conjunto de herramientas digitales simples, propias y pensadas para el entorno público.

Estamos en pre-seed. Todavía no hay un producto porque lo que buscamos es construirlo junto a quienes apuesten por esta visión.

Entrar ahora no es subirse a algo que ya existe: es definir lo que Europa necesita desde el origen.

Una alternativa que dé más libertad a Europa, adaptada al contexto actual y fácil de usar.

— el impulso que buscamos

Para que esta visión avance, buscamos aliados. Inversores y colaboradores estratégicos que compartan el rumbo, y quieran formar parte de su construcción desde el principio.

No buscamos acelerar a toda costa, sino consolidar bien el primer paso.

Preferimos avanzar con solidez y con socios que entiendan que lo que está en juego es la autonomía digital de Europa.

— y aquí lo esencial

¿Qué tipo de apoyo buscamos?

Uno o dos socios inversores que nos acompañen desde el principio.No para escalar. Para arrancar.

También buscamos aliados estratégicos europeos, con base tecnológica, experiencia y visión.Queremos sumar lo que nos falta, sin comprometer lo que somos.

¿Hay espacio para instituciones públicas?

Queremos hacer pilotos con ayuntamientos, gobiernos, agencias y organismos europeos.

Lo público no es nuestro destino: es nuestro punto de partida.

¿Qué esperamos de estas colaboraciones?

Confianza, visión compartida y ganas reales de construir. Queremos sumar a personas o entidades que crean en el proyecto, que entiendan su potencial y quieran seguir nuestra ruta.

Se trata de formar parte del futuro tecnológico e innovador europeo.

Algo más específico

Has de ser una entidad legalmente registrada en Europa con menos del 20 % de capital proveniente de fuera del Espacio Económico Europeo, no estar sancionada ni investigada por instituciones públicas de la UE o de sus Estados miembro y no mantener inversiones activas en productos o empresas que desarrollen productos comparables.